lunes, 2 de marzo de 2015

INSPIRACIÓN EN EL ALMA

La inspiración está en el alma.
No me inspiran las mañanas nubladas.
No me inspiran las amapolas mecidas por el cierzo loco del mes de febrero.
No me inspiran las nubes que pasan raudas volando por el cielo azul que se ha vuelto negro.
No me inspiran las noches, oscuras, sin luz, tan opacas que ni alumbran la soledad que me embarga el alma.

Inspiración perdida, regresa a mis dedos muertos.
Inspiración marchita, haz como la primavera y florece en mi pecho ahogado por la lluvia ácida que quema.
Inspiración muerta, regresa de la tumba en la que yo misma te enterré, olvidada, hace días.
Inspiración desolada, acompáñame en la soledad que  me embarga el alma.

Me inspira remover recuerdos no olvidados.
Me inspira imaginar el aroma del salitre de las olas que bañaron mi piel en otra vida.
Me inspira pensarte, olerte, imaginarte, dibujarte en el humo del incienso que se eleva hasta los tejados.
Me inspira revolver en los cajones y encontrar fragmentos de historias no olvidadas que me queman el alma.
La inspiración está en el alma.